domingo, 26 de abril de 2015

Diálogo y Acuerdo en Pareja

El programa de hoy se titula "DIÁLOGO Y ACUERDO EN PAREJA" y estaremos conversando en el que conversaremos sobre cómo dialogar y llegar a acuerdos con nuestra pareja.

Esta semana es muy especial para mí.  Mañana (13 de marzo, 2015) se cumplen dos años de la partida de nuestra querida maestra Elaine De Beauport para unirse con la Luz… Y hoy este programa será una honra a su amor, su esperanza y su sabiduría para celebrar la Vida.  

Y es que para mí Elaine siempre será mi conexión con la esperanza, el amor y la conciencia de que todos somos Uno en Energía…

Así que hoy nos acompañan tres invitadas: Elaine, desde la Luz.. y aquí en cabina, mi maestra la Lic. Aura Sofía Díaz y la Lic. Nora Ovelar.  

Muchas gracias Aura Sofía y Nora por acompañarnos el día de hoy aquí en cabina.  Bienvenidas a Parejeando Ando y a Radio Comunidad. Me siento honrada de compartir con ustedes el tema de nuestro programa de hoy “DIÁLOGO Y ACUERDO EN PAREJA”.

Aura Sofía es Psicóloga, Terapeuta familiar formada por Virginia Satir, Magister en Desarrollo Organizacional y Doctorado en Desarrollo Humano de la Universidad Fielding de California.  Co-Fundadora con Elaine de Beauport del Instituto Mead de Venezuela, Co-autora del Libro “Three Faces of the Mind” y traductora de la versión en español. Facilitadora organizacional desde hace veinticinco años y  Vicepresidente del Instituto Mead de Venezuela. 

Forma los facilitadores de los seminarios Facultándome, La Mente y la Paz, Comunicación, Acción Consciente, la Fuerza Vital, las Inteligencias Emocionales y el Diálogo en los tres Niveles de emoción, palabra y acción y Desarrollo Humano en el Hogar

Facilita talleres sobre el Cerebro Triuno y el Sistema de Inteligencias Múltiples para la “Cátedra Convivencia, Cognición y Conciencia, Elaine de Beauport” de la UCV y para empresas, profesores, padres de familia, y personas del área de orientación, terapia y salud. Facilita el Programa “Empatia para Convivir”.

Es ponente en eventos nacionales e internacionales.

Nora Ovelar es Educadora, graduada en la UCV,  Doctorado en Francia.
Formación en Coaching con Rafael Echeverría y Humberto Maturana.  Profesora de Teorías Pedagógicas en la UCV. Directora de la Escuela de Educación UCV (2008-2011). Investigadora en la línea de Educación y Ciudadanía.  Actualmente miembro del Comité Académico del Instituto Mead.

Desde 1991 se ha formado en los talleres y cursos dictados por la Dra. Elaine de Beauport  y Dra. Aura Sofía Díaz (Instituto MEAD de Venezuela). Facilitadora certificada del Instituto MEAD de Venezuela en el Seminario La Mente y la Paz,  taller Diálogo, Negociación y Acuerdos, curso en  Inteligencias emocionales y del programa Empatía para Convivir.  Fundadora de la Cátedra  libre UCV  “Convivencia, Cognición y  Conciencia Elaine de Beauport".

Quisiera comenzar el programa con un cita de Elaine y de Aura Sofía Díaz:

Cada célula es energía capaz de generar crecimiento y destrucción. Cada átomo es nuclear, y desprende distintas vibraciones que estamos apenas comenzando a aprender a manejar. Por lo tanto las diferencias, los desacuerdos y los conflictos son normales. Lo que no es normal ni sano es destruir la vida como una forma de resolver conflictos.”  

La base de este modelo de diálogo del Instituto Mead tiene que ver con el hecho de que todos somos energía y que por ende el conflicto lo llevamos en cada célula.   

Leonor tú dices que no es justo que destruyamos la vida pero en realidad no es justo tampoco relaciones porque si tú eres energía y es natural estar en conflicto, ¿porqué no usamos el ganar ganar?  Naturalmente tú puedes pensar: "yo le voy a ganar"... y tú crees que la otra persona va a quedar contenta o no se va defender?  Por eso no podemos arrinconar a la otra persona... Ahora imagínate cuándo el que arrinconas es a tu pareja...

Y lo más triste de todo esto es que en este momento lo que más vemos son problemas de violencia en pareja, violencia física y ahí es donde realmente vemos que se nos está olvidando cuál es la esencia, mi propia esencia.

Hay demasiada frustración en los seres humanos.  Y en la mujer pareciera que hubiera más frustración en la mujer que en el hombre.  La mujer creo que es está sintiendo más acorralada y tiende a sacudirse.  Y como no puede sacudirse afuera, con el jefe, pues entonces se sacude dentro de las cuatro paredes de la casa, con la pareja.  

Yo creo Aura, que está sucediendo algo, que ya ha surgido en varios programas, y es que ya desde hace varios años las mujeres estamos saliendo al ruedo laboral y eso nos ha dado una cierta seguridad, y pareciera que hay una diferencia entre la seguridad de la mujer en el ámbito laboral y la mujer en la casa, que es complaciente con el marido, con miedo a poner en jaque la relación con el marido y quedarse sola con los hijos... Y a veces no sabes quién eres: si la segura o la complaciente que le tiene miedo a quedarse sola.

Yo creo Leonor que en esa mujer que sale a la calle hay muchas frustraciones
que se van acumulando, un poco como decía Jung, en el calderón hirviente que es el mundo emocional.  Y en ese calderón tú vas poniendo las frustraciones del día a día también en el ambiente laboral, del país, de las amistades y la mujer va cocinando ese sancocho en su olla del mundo emocional y cuando llega a la casa se le derrama... Si no se le baja un poquito la candela al calderón hirviente que cargamos ahora en algún lado tiene que derramarse ese hervor y ocurre en la casa y como tratas de no hacerlo con los hijos, lo hace con la pareja... y como la mujer viene empoderada de ser una persona con un peso específico suficiente en su mundo laboral, cree que puede proceder a comportarse de la misma manera con la pareja, que además viene de tener un calderón igual de hirviente que el de la mujer.

Es que además de la situación política, en este momento, estamos viviendo una situación económica en la que ambos sienten que no son capaces de proveer para su familia.  Se matan trabajando y en el primer día ya no tienen nada y eso está creando un ambiente cada vez más fuerte a nivel de pareja.

No podemos negar cuál es la situación actual.   Hay tres cosas que veo todos los días en mi consulta de pareja:


  1. La dificultad para identificar y expresar lo que sienten.
  2. La dificultad cada vez más notoria para dialogar y llegar a un acuerdo entre ambos.  Lo que suele suceder, es que se "comunican" desde los gritos, los insultos y los golpes... 
  3. Y todo esto en un contexto de un país con las siguientes característcas: 
  • Un país aún polarizado, 
  • Sufriendo por la incertidumbre de lo que va a pasar no sólo por el futuro lejano sino en la inmediatez del día, sufriendo por el miedo por la inseguridad.  Madres y padres que salen en la mañana con el miedo de si llegarán o no seguros a su trabajo y de nuevo de vuelta a casa. Ambos miembros de la pareja comparten su angustia escribiéndose mensajes para saber si llegaron con bien a su destino. 
  • Además está la lucha por la escasez de bienes de primera necesidad
  • La lucha por poder producir el dinero que necesitamos para poder pasar el mes. 
  • Algunos con la incertidumbre de si se quedan o se arriesgan a probar suerte en otro país.  
Y a veces en una pareja, ambos miembros de la pareja tiene posiciones distintas frente a estas situaciones y no tienen la más remota idea de qué hacer con sus diferencias.

¿Cuando hay situaciones de violencia, cómo pueden los miembros de la pareja  identificar qué es lo que están sintiendo, expresarlo y entonces poder conversar, en lugar de ofenderse, insultarse e incluso golpearse?

A veces sabemos sentir, identificar los sentimientos, más no sabemos expresarlos porque generalmente los expresamos "cayendo" sobre el otro, culpando al otro de lo que yo estoy sintiendo, y resulta que hasta que no nos demos cuenta de que lo que yo pienso es mi responsabilidad, y lo que yo siento es mi responsabilidad no podremos expresarnos. 

Tú puedes hacer una acción que me hace a mí sentirme de determinada manera, pero la intensidad del sentimiento está en mí, yo soy la dueña o la "culpable" de la intensidad de mi sentimiento.  Es decir que no depende del otro.   

Por eso cuando le dices a tu pareja "Me hiciste poner furios@" en realidad no es así. Resulta que tu pareja hizo una acción que en ti sirvió de gatillo para despertar el caldero hirviente del que hablamos antes. Mientras más lleno tengas el caldero, más se te va a derramar la sopa en el momento que te pongas brav@.  Y eso no es culpa de la acción del otro.  

Las acciones despiertan diferentes emociones, dependiendo de las experiencias vividas, y de la memoria que tiene cada uno de ese sentimiento, y de esa acción. 

Si yo por ejemplo tengo en mi memoria que a mí me gritaban en mi casa, y en mi experiencia me pongo furiosa cada vez que me grita mi marido, mi esposo no está siendo el que me hace sacar esa rabia, sino ese recuerdo viejo que tengo de la impotencia que sentía por un padre o una madre gritándome, que ahora si puedo lo saco con mi marido, pero me lo trago el doble de lo que él está haciendo.

Lo que hay en el fondo es un niño o una niña herid@... queriendo algo.  

Por eso, sólo si te das cuenta de lo que tú quieres, puedes empezar a expresarte de otra manera.  Por eso si logras pensar, cuando te pones furios@, qué es lo que quieres, por ejemplo, que quieres que te respete, se lo puedes pedir más tarde. Cuando te das cuenta que lo que tienes es hambre de respeto, tienes que empezar por respetarte a ti mism@ poco a poco para ir nutriendo esa falla de respeto que tengo, ir llenándote de respeto para poder reaccionar menos violentamente la próxima vez que sienta que alguien me irrespeta.

Y empezar a identificar aquellas sensaciones que se dan en mí, incluso corporalmente, que me indican que yo me estoy irrespetando. 

¿Nora quieres complementar algo?

A mí me ha servido mucho preguntarme por una parte: 

  • ¿Cuáles acciones puedo hacer yo para sentirme respetada? y  
  • ¿Cuáles acciones le puedo pedir al otro para sentirme respetada?... 
Porque cada uno de nosotros tiene una concepción distinta del respeto y por ello es necesario hacerle saber al otro qué es lo que quiero.

Tú decías Aura que una de las cosas más importantes en este tema es que primero necesitas respetarte tú... y una de las cosas que veo en terapia es que cuando le preguntas a la persona, cuando se queja de que no la respetan, "¿Tú te respetas a ti mism@?" ... hay un desmoronamiento del cuerpo porque se da cuenta de que está total y absolutamente olvidada, abandonada, es decir, ni respeto ni nada, es un ser invisible para sí mism@. 



Tú notas por ejemplo cuán invisibles somos cuando le preguntas:"¿Qué quieres?" "¿Qué es lo que estás queriendo?" y es difícil saber que es lo que estoy queriendo. ¿Qué es lo que tú deseas?  ¿Qué es lo que te hace falta?  Muy difícil saber y si no sabes lo que quieres, cómo te puedes respetar si no sabes lo que quieres y si no te puedes ver.  





Por eso el punto de partida es empezar a vernos a nosotros mismos, respetarnos a nosotros mismos, para poder entonces salir hacia el otro. 


Quizá una de las formas de expresión más comunes en pareja es el reclamo, la acusación y la crítica.   

¿Cómo se puede hacer para sobrepasar el reclamo y llegar a expresar la emoción y pedir? Algo práctico

Lo primero es empezar a hablar desde el yo.     Cuando empiezas hablando desde el tú, como por ejemplo "Mira tú".... o "Tú eres XXXX"... o "Tú me dijiste xxxx"  estoy hablando desde el reclamo... 

Mientras que cuando hablo comenzando desde el yo, desde mi sentir, como por ejemplo cuando digo: "Yo quisiera que hoy me dijeras algo bonito", o "Yo quiero oírte"... Yo quisiera sentirme querida hoy por ti... Lo que se produce es un reconocimiento del yo y el otro no se siente reclamado.

El yo hace que inmediatamente centre mi conciencia en mí mismo, según nos dice Nora.. Y de nuevo volvemos al tema de qué es lo que quiero yo.  ¿Qué quiero en mi relación? ¿Qué quiero yo en mi vida?  Estoy poniendo el foco en mí mismo y es más saludable. Y esta es otra forma de empezar a compartir las necesidades y los quereres y empezar a asumir las responsabilidades de cada uno en cada situación, y esto lo podemos enlazar con lo que decíamos al principio:  esta emoción es mía. No es: "Tú que me hiciste poner brav@" sino "Yo me siento brav@" y eso es mío.  

Y en esto que venimos conversando surge el tema de "escucharme" porque para yo saber lo que siento, para saber lo que quiero, necesito escucharme a mí misma y después escuchar al otro.  

¿Cómo podemos hacer para aprender a escucharme y escuchar al otro?

Yo creo que una de las cosas es que hay que aclararle al ser humano son ciertas y determinadas palabras que son importantísimas para empezar a escuchar diferente:  
  1. "Yo Pienso"
  2. "Yo Quiero o Quisiera"
  3. "Yo Necesito"  
Son tres palabras que salen desde los tres niveles del cerebro, que son vitales. Yo Pienso es una cosa lógica, fría que podemos dialogar, Yo siento le da un poquito más de  calor a la situación, si es que va a venir una discusión y Yo Necesito habla del cerebro básico de la necesidad del comportamiento y entonces debes empezar a oír mejor esas palabras, porque cuando hablo desde mi necesidad -"Yo necesito que tú me oigas"- no es igual que cuando digo "Yo quiero que tú me oigas" o cuando digo "Yo pienso que debes oírme" es diferente a decir "Yo siento que tú no me oyes". Hay esos tres niveles del cerebro que son importantísimos en el diálogo y en la negociación.   

Es decir que cuando escuchas a tu pareja que te dice:  "Yo necesito que me escuches", la situación está grave. Lo ideal entonces es que comiences a escuchar desde los niveles más bajos de necesidad porque cuando llegas al nivel de "Yo necesito que me oigas", estás ya en un nivel de necesidad de sobrevivencia.  



En la frustración y en la rabia tú no hablas de necesidad sino que generalmente culpas al otro. Cuando "Me sacas la piedra" estoy en el nivel de frustración.  Lo que no he llegado a entender y a comprender es que la piedra la tengo yo ya. Entonces depende de si lo que tengo es un terroncito, o arenilla o una gran roca.  Yo las tengo ya y las acciones de mi pareja me las sacan.  Tengo entonces que tener cuidado de no dejarlas salir sobre mi pareja. Ahí es donde vienen los encuentros. 

Yo tengo que entrar en mí a ver qué es lo que yo necesito, o qué es lo que yo quiero y qué es lo que yo pienso que debo hablar contigo.   Además, si yo pienso que "yo debo hablar" es muy diferente a si "yo siento que yo quiero hablar".  Por eso es que no sólo hay que oírse sino escucharse verdaderamente para saber si vienes desde la necesidad, desde el reclamo, desde el afecto, desde el dolor... saber desde dónde vienes a mí.   

Cuando las parejas están conversando o discutiendo, llega un punto en que es necesario encontrar alternativas. 

¿Cómo nos podemos abrir a buscar alternativas?

  1. Apreciar la Relación: Es necesario conectarse con el aprecio por la relación. Eso me pone en una posición de:  "yo quiero esta relación, aunque en este momento me esté sacando la piedra -qué es mía.  Es vital darme cuenta de cual es mi posición para continuar con la relación, porque si no lo que estás buscando otra cosa: cierre de la relación.  Si yo quiero continuar con la relación tengo que conectarme con el aprecio por la relación, porque de lo contrario habrá un clima enrarecido con respecto al diálogo.    
  2. Y otro punto que es vital es "Bajarse del Caballo", bajarse del orgullo, de las posiciones preestablecidas.  Es estar dispuesto a: Déjame oírlo desde otro punto de vista. Si yo solamente quiero ganar yo y no me importa si el otro gana o no gana, eso va a crear una resentimiento.  Si el otro no sintió que ganó nada, se crea un resentimiento y a la larga vuelves al conflicto, con mayor intensidad porque ya hay un resentimiento y voy a evitar dialogar porque me vas a ganar, me vas a "fregar", voy a salir perdiendo.  

Herramientas para llevar los acuerdos a la acción?

Nosotros los venezolanos somos muy creativos y tenemos dificultad para concretar.    Lo primero que tenemos que hacer es irnos al hemisferio izquierdo de lo concreto porque en Venezuela tenemos mucho hemisferio derecho abierto que ve alternativas, alternativas y no concreto.  Somos muy amigos de "Blanca Nieves", que es la generalidad de lo que hablamos, y se nos olvida que Blanca Nieves tiene 7 enanos.  

Esos 7 enanos son:




Son siete enanos que Blanca Nieves, o la manera de pensar general, tiene para ir a la especificidad de "quién va a hacer qué", y "cuándo nos volvemos a ver" para ver "cuánto de lo que hemos hablado vas a llevar a la acción".  Una vez que concretas los 7 enanos de Blanca Nieves pones una fecha para volvernos a reunir -mañana en la tarde con un té, o el sábado en la noche con un café- para ver cuánto de lo que decidimos, concretamente, hemos llevado a la acción.  Y si tú dentro de seis días, o el tiempo que hayamos acordado que nos volvemos a ver, no has llevado nada a la acción, quiere decir que lo que concretamos no te sirvió.  Entonces vamos a poner otras cosas concretas para ver quién hace qué, cómo,cuándo, donde, porqué y para qué.   

Tenemos que empezar a practicar el hemisferio izquierdo de lo concreto, no de la generalidad.  Es decir que vamos a hacer una distribución de roles y establecer para cuándo lo vas a hacer, dónde y para cuándo lo vas a tener listo. Es necesario establecer los límites de tiempo para la entrega de común acuerdo y al terminar el plazo nos vemos e nuevo, a una hora determinada de antemano, para chequear cuál es la situación.   Es necesario respetar los acuerdos y el primer acuerdo es el día y la hora de la próxima reunión. De esta manera podemos llegar a un acuerdo y a unas acciones específicas que me permitan ver si he cumplido o no con lo acordado.  Y ver que si no hemos hecho nada no hemos avanzado y estamos dándole vueltas a lo mismo.  Y caemos entonces de nuevo en el tema de la responsabilidad : si no le doy acción al acuerdo y no avanzo, es mi responsabilidad y si llevo a la acción lo acordado y avanzo, también es mi responsabilidad y con ello se va generando una base de confianza en que se van cumpliendo los acuerdos, y eso es una enseñanza a nivel personal y a nivel de pareja y familia. 

Con esta energía positiva del logro de los acuerdos mediante la acción me despido por hoy. 

Si desean contactar a AURA SOFÍA DÍAZ, éstas son sus coordenadas:
Celular:  0414-1160998

Y si deseas contactar a Nora lo puedes hacer por:
Celular :04241113484/ 04122006672

Cierro este programa de hoy con esta cita de Elaine De Beauport y Aura Sofía Díaz:
"¿Cuándo vendrá la paz?  Cuando nosotros los seres humanos la tejamos… La Paz vendrá cuando nos demos cuenta de que CADA VIDA ES SAGRADA”

Me despido por hoy, y nos encontramos de nuevo el próximo jueves de  5 a 6 de la tarde hora de Venezuela por Radio Comunidad. 

Audio Completo del Programa


Si deseas escuchar el audio completo del programa, lo puedes hacer en el siguiente enlace:  "DIÁLOGO Y ACUERDO EN PAREJA

domingo, 12 de abril de 2015

Ahora que soy Viud@

Nuestro programa de hoy se titula “AHORA QUE SOY VIUD@”, en el que conversaremos sobre el proceso de duelo cuando muere la pareja y algunas maneras de ir superándolo.

Hoy nos acompaña aquí en cabina, mi amiga y colega la Lic. Magaly Pérez. Magaly es Antropóloga. Psicoterapeuta Corporal y Gestalt con 20 años de experiencia en consulta privada y trabajo en grupos de crecimiento personal.
Muchas gracias Magaly por acompañarnos el día de hoy.  Bienvenida a Parejeando Ando y a Radio Comunidad. Me siento contenta y honrada de compartir contigo el tema de nuestro programa de hoy “AHORA QUE SOY VIUD@”.

Me siento honrada de compartir este tema contigo Magaly.  Sé que el duelo es uno de los temas que has venido trabajando como terapeuta. 

El duelo es un tema difícil porque a ninguno de nosotros nos gusta el dolor y resulta que es parte de la vida y cuando llega, llega a la puerta de la casa, directo, envuelto de una manera que no nos gusta y tiene con mi nombre y apellido. Y no nos queda otra que recibirlo.

Yo quería, antes de que comencemos, decir que un duelo es difícil que se supere, es más bien una recuperación.  El duelo tiene una cualidad, que es que cuando recordamos a esa persona se mueve una serie de emociones, no igual que al principio, pero siempre estará allí, ya que es una herida y deja una cicatriz, y cuando tocamos la cicatriz aparece la historia.  Mientras no te toques la cicatriz no pasa nada.  



De hecho antes de empezar el programa estábamos hablando de situaciones de duelo que hemos vivido y yo le comentaba a Magaly que mientras estaba preparando el programa se me movió la cicatriz de un duelo y no quería preparar el programa y comencé a jugar con mi perra, tratando de hacerme la loca.  Efectivamente se movió la cicatriz y salió el tema, que aunque ya me siento recuperada, salió porque sigue estando ahí.

Esta misma sensación que hemos descrito para el duelo en general se aplica para todo tipo de duelo: por la pareja, por un hijo, por el padre, por la madre, por un amigo, por una mascota.  


El duelo es esa sensación subjetiva, lacerante. Cuando hablamos de duelo, nos referimos a una sensación en partes específicas del cuerpo. Cuando hablamos de duelo nos tocamos entre el pecho y el abdomen.  Cuando nos referimos a un duelo no decimos que nos duele el dedo gordo del pie. Tú te tocas el pecho, porque es un dolor en el alma.  Te tocas el corazón, pero no es sólo el corazón físico sino el alma, porque ahí confluyen todas nuestras partes: confluye nuestro cuerpo físico, nuestro cuerpo emocional, nuestro cuerpo espiritual, nuestra mente... 

Todo se conjuga allí y la sensación es lacerante, como de herida abierta... Por eso, en la mayoría de las descripciones que hacemos cuando  un ser querido se va, decimos que "se nos partió el corazón". 

Magaly, quiero aprovechar lo que estás diciendo para entrar en imágenes concretas de esta sensación tan fuerte que produce la muerte de la pareja. 

Estaba buscando poesía y encontré este poema de Pablo Neruda, que se llama el Tango del Viudo, y voy a compartir un fragmento con ustedes:  


“…¡qué noche tan grande, qué tierra tan sola! He llegado otra vez a los dormitorios solitarios, a almorzar en los restaurantes comida fría, y otra vez tiro al suelo los pantalones y las camisas, no hay perchas en mi habitación, ni retratos de nadie en las paredes.

Cuánta sombra de la que hay en mi alma daría por recobrarte, y qué amenazadores me parecen los nombres de los meses, y la palabra invierno qué sonido de tambor lúgubre tiene.”  

Un día estás casad@ y al día siguiente tu pareja ya se fue, no está ahí, contigo.  Estas sol@ y tu vida ya no tiene sentido y necesitas seguir adelante, sin pareja, viud@, de duelo.   Este es un dolor indescriptible a intransferible.  No se lo puedes dar a nadie. 



Cuando estás en duelo, los demás, con su mejor intención, te dan consejos y te dicen cosas comos éstas:  "Tranquil@" , "Esto va a pasar"  "No va a ser tan duro como tú crees", "De esto vas a salir fortalecid@" , "Tú eres fuerte".  se refuerza mucha una parte que tiene que ver con una ilusión social que considera que le hemos ganado al dolor. Que le hayamos ganado al dolor significa que hay pastillas contra el dolor, del tipo que sea.  Podemos también distraernos buscando el ruido, o también distraernos buscando una adicción, que puede ir desde un medicamento hasta cualquier otra adicción, todo con tal de no querer abrir el paquete. 

Magaly este tema que estamos hablando no sólo es importante para el que está viviendo el duelo, sino para las personas que están en su entorno, porque la evasión no es sólo del que perdió la pareja, sino de todas las personas que están a su alrededor y lo están viendo en dolor y no saben qué hacer y es cuando vienen los intentos de yo tratar de consolarte, yo tratar de que te rías, de que te sientas bien y la verdad es que no puedes "brincarte la alcabala".  Ahí podríamos decir Leonor que hay un punto que tiene que ver con el propio proceso.  


El Duelo es un Proceso

Lo que ha sido estudiado por diferentes autores que se han dedicado a trabajar el tema es que el duelo es un proceso y como tal tiene unas fases que no son mecánicas y no están perfectamente estructuradas y en orden.  No es que me digo "ahorita estoy en negación"  o estoy viviendo la etapa de la rabia o en tristeza o en la etapa de aceptación.  No es así.  Eso va a depender mucho del vínculo que teníamos con esa persona o con la forma en que la persona se fue. Lo que sí es común es que ese primer momento, es un shock muy fuerte y entramos en negación. Eso es normal para todos y no es que puedo decir: "no no no eso no me está pasando a mí". 




Yo he escuchado, y también he vivido, gente que dice y se forma la imagen mental de que la persona se fue de viaje. Esa es una ilusión.  Es una manera de ir retrasando y evadir lo que está sucediendo y aceptar que en realidad la persona se murió.


Un Doble Duelo: La Pareja y el/la Amig@

Magaly tú te referías a que las características del proceso de duelo van a depender del tipo de relación de pareja que tuvieran.  Yo me imagino que no es igual si yo me llevaba bien y amaba a mi pareja que si tenía una relación no armoniosa y ya no la querías, ya que hay muchas razones por las cuales te puedes mantener con una persona.  Efectivamente, con el añadido, Leonor, de que esa persona a la que amaba y era mi pareja, en algún momento también fue mi amigo, por lo que vivimos un doble duelo: por la pareja y por el amigo. Es como enterrar a dos personas.  Y muchas veces, a medida que pasan los días te vas dando cuenta de que perdiste a una persona con la cual tenías una comunicación en la que no necesitabas ni siquiera hablar, se entendían con sólo mirarse y eso no sólo es irrecuperable sino que son pocas las personas con las cuales tienes ese tipo de comunicación.  No en todas las relaciones de pareja se da esta complicidad, porque puede ser una relación más pasional.  En la pérdida de la pareja, a veces también se va un amigo porque también hubo una relación de amistad.  Y cuesta mucho entender lo que está sucediendo.  A veces hay que gente que me dice que no entienden porqué les está costando tanto, hasta que se dan cuenta que lo que pasa es que tienen que despedir también al amigo.  

¿Qué Pasa Cuando la Relación No ha Sido Armoniosa?


Supongo Magaly que pueden surgir sentimientos muy fuertes como la culpa o la rabia o el resentimiento.   ¿Además de todo el dolor por la pérdida tienes que manejar todas estas emociones adicionales?

Todas forman parte del mismo proceso de duelo. El proceso del duelo hay que verlo en el contexto:  en la historia de la pareja, en el vínculo.  Si la relación fue armoniosa, la rabia va a estar atenuada.  En ese caso la sensación de rabia va a aparecer en preguntas tales como "¿porqué pasó esto en este momento?" o "yo pude haber hecho algo" o "porqué a mí"... Si hay algo pendiente con la persona que se va,  se hace mucho mayor el proceso de rabia porque quedaron cosas pendientes por decir. La rabia será en parte conmigo y también por el otro que murió.  Y ahí debemos invitar a la compasión, porque probablemente esa persona que era en ese momento ya no es la mía que soy hoy que estoy revisándome y dándome cuenta de que hubo cosas que hice que no eran saludables.  El momento de conciencia que tenía en ese momento no me permitía hacerlo diferente.


¿El Duelo por la Muerte Pareja es el más Estresante de la Vida?


Primero va la muerte por la pareja, luego la muerte por los padres y por los hijos.  El nivel de estrés tiene que ver con el vínculo. 

El vínculo con tus padres cuando eres adulto tiende a ser menor y tiendes a separarte si tienes una relación de pareja, y se modifica muchísimo tu espacio, tu entorno porque tu relación de pareja llega a formar parte importante de tu vida porque estás ya construyendo familia  Como el vínculo es mucho más fuerte porque nos relacionamos desde lo afectivo, nos relacionamos desde lo financiero, nos relacionamos desde lo sexual, nos relacionamos desde la comunicación, es decir son muchos espacios de nuestro entorno como organismo en los que estamos relacionándonos con el mismo espacio del otro. Es un espacio tuyo y con el otro.   


Por eso cuando se da la ruptura por la muerte de la pareja, la sensación en el cuerpo es que no solamente el dolor lo siente en el corazón como nos pasa con los padres o en la barriga con la sensación de vacío por la muerte del hijo. En el duelo por la pareja el dolor pasa por la sexualidad, pasa por la garganta por la comunicación y porque estábamos vinculados en muchos terrenos que eran comunes. 


El Duelo en el Cuerpo


Ahora que te estoy escuchando Magaly estoy recordando un tema que tiene que ver con la conexión sexual y es que energéticamente la conexión sexual con una persona tarda 7 años en romperse por lo que aunque la persona ya no esté, la conexión permanece. Esto es muy interesante porque si estás atravesando por un duelo, la sexualidad también está atravesando el duelo. Lo más probable es que durante las primeras fases del duelo no haya capacidad física para relacionarse sexualmente con otro, porque el cuerpo no está preparado.  Yo digo que un duelo es para el cuerpo como un tsunami.  Es un devastamiento total.  Quedas con tus reservas en cero, muy agotado. Tienes que utilizar todos tus recursos internos para poder afrontar la situación...

Es decir Magaly, que en realidad el duelo es un tema de sobrevivencia. Por eso es que existe la expresión que se refiere al que supera el duelo como "el sobreviviente".  La sensación corporal es de desgaste, quedas devastado... Hay un desgaste y una devastación. Todo queda muy conmovido, es una conmoción muy grande y se necesita un tiempo para recuperarse.  Por eso normalmente, cuando estamos en esa primera fase del duelo es bastante seguro que nos dé una gripe muy fuerte, el gripón,  porque todas nuestras defensas se vinieron al piso, y el cuerpo tiene la necesidad de descansar y de llorar.  Me gustó mucho la
canción de Ricardo Montaner "Déjame Llorar", por que tenemos también un tema cultural con el tema de llorar, no tanto para lo femenino, como hicimos mención en nuestro primera programa sobre duelo, es decir que las mujeres, tenemos permiso para llorar, salvo algunas horas en las que estamos muy fuertes y nos lo permitimos porque nos hemos vuelto masculinas.  Llorar es importantísimo porque es una forma de nuestro organismo, de nuestra psique y de nuestra emocionalidad y de nuestro cuerpo de atravesar este camino que no es nada fácil, y de aliviarse.   Las lágrimas están puestas allí y nos las dio Dios para que drenáramos las tristezas.     

Magaly, y ahora que estamos hablando del tsunami que es el duelo,  yo estoy aquí pensando en el grado de devastación que puede existir que tiene toda su vida viviendo con su pareja y la pareja muere.  



¿Cómo puede una persona mayor manejar la viudez cuando ha vivido toda su vida con esa persona?   ¿Influye en algo el tiempo que tienes con la persona, la edad, el género... ¿Hay alguna diferencia entre una viuda mayor y un viudo mayor?  

Depende del contexto Leonor.  Si son personas que tienen hijos por ejemplo, cuentan con el apoyo de su familia.  En este tipo de duelo en particular, la familia es un elemento importante, porque la familia es el primer espacio de contención.           

Si muere alguno de los padres ya mayores, ¿cómo hace el hijo para darle contención al que queda si él también está viviendo un duelo?                                                                                     
Hay que diferenciar, porque si tú eres hijo, estás haciendo el duelo de tu padre/madre y el duelo de mamá o papá es el viudo.  Si esto cuesta es preferible a otra persona que apoye o también abrir el espacio de acompañamiento en tanto tú puedas.  Yo siempre digo que hay que invitar a la compasión.  La compasión es un elemento, un afecto un poco más allá del amor que me permite tener empatía con el otro y poder entender que ese duelo que está viviendo, ese vínculo es muy diferente al vínculo que yo tuve.  Por ejemplo, mi vínculo con mi mamá o con mi papá es muy diferente al vínculo que mi mamá o mi papá tuvo con su pareja.   Hay historias, hay memorias, hay recuerdos que son de ellos como pareja y yo tendré los recuerdos míos como familia, como hijo, como hija.  Hay unos recuerdos y unas vivencias de pareja, de los cuales yo no formé parte.  Tener esa conciencia te permite estar allí para acompañar y entender.  La contención familiar es un apoyo importante.  Si la muerte sucedió tenemos que esperar mínimo 6 semanas para poder trabajar algo.  

Escuchamos "Si la muerte pisa mi huerto", de Joan Manuel Serrat y nos conectamos con otra perspectiva del duelo, otra dimensión de la muerte: ¿qué va a ocurrir cuando muera, cuando yo no esté? ¿quién se va a poner mi pijama? ¿quién dormirá con mi mujer? ¿quién ocupará mi silla en la mesa? ¿quién se la va a susurrar al oído?  


La verdad es que todo cambia. Alguien va a tomar tu lugar, si le dan el espacio. Y fíjense que estas preguntas como ¿Quién va a venir a mi entierro?  ¿Quién va a estar allí? ¿Quién me va a ir a velar? ¿Quién me va a llorar? ¿Quién me va a llevar flores?   El entierro es un momento clave, de cierre.   De cierre, y a veces de apertura de nuevas cosas, porque ahí podemos descubrir personajes que de pronto estaban ocultos, fuera del panorama, que nadie conocía sino solamente la persona que murió.    Esto aquí en Venezuela es común.
¿Cómo ves tu esta vivencia de la fantasía de lo que va a ocurrir después de mi muerte?

La forma en que se lo plantea Joan Manuel Serrat está visto desde lo que me pasaría a mí pero cuando la persona muere, ni pendiente de todo ese rollo que deja en el entorno.  El rollo que deja es todo ese mundo externo que queda después del ritual del entierro. Ese es un momento en el proceso de duelo, que tiene que ver con el ritual : todo lo que significa los preparativos... Muchas veces allí la negación como elemento importante, nos permite poder hacer las diligencias necesarias. Sí, la negación hace que yo me bloquee o que yo me anestesie para poder resolver cosas que debo resolver, que son cosas prácticas, operativas.  A veces decimos que un funeral fue bueno porque la viuda estuvo tranquilita, pero a veces esta drogada o anestesiada.  


El Duelo Complicado





Yo quería hacer mención a una una parte en el duelo que puede ser complicada, cuando ha habido una vida oculta, como por ejemplo el caso de la amante.  Se presenta mucho conflicto en ese momento, ya fuera porque era un secreto a voces o porque en realidad nadie lo sabía.   En ese no saber no solamente está la amante, sino que a veces es la amante con hijos.  Esto puede ser un elemento que tienda a complicar un duelo. Para la amante porque no pudo participar, asumir el dolor para la esposa o esposo porque también hubo un tema de deslealtad y traición y esto se suma a toda la amalgama de emociones que se viven.  

Claro porque además del dolor por la partida de la persona con la que compartiste tu vida, está el tema de que "esta persona no es quien yo pensaba".  ¿Qué pasó aquí ?  ¿Cómo me pudieron engañar de esta manera? Esto forma parte de un elemento que hay que trabajar porque nos metemos en rabia resentimiento y el tema del perdón adquiere una dimensión mayor en estos casos. Esto es lo que nosotros llamamos un duelo complicado, el duelo de la amante o de la mujer que descubre que su pareja le había sido infiel, justo durante el proceso de duelo. 

Hasta ahora, en Venezuela el tema del duelo complicado por la amante, era muy común.  Ahora el duelo complicado no es sólo por la amante sino que cada día es más común el duelo complicado por el amante. En la actualidad, los amantes se dan por ambos lados. 

Hay otros elementos que están dentro del marco del duelo que tienen que ver  con lo que ocurre muchos después:  Los aniversarios, los cumpleaños, la navidad, el año nuevo, que ya lo hablamos en el programa anterior.  Hay un punto que también es muy importante:  Las llamadas que hay que hacer, planes que quedaron pendientes, temas de banco, que nos devuelven a la realidad. Estas situaciones son complicadas, requieren que tenga los pies en la tierra porque nadie va a venir a resolverlo por mí.





Estamos hablando de todo lo que hay que hacer y nos queda conversar sobre la diferencia que puede haber entre el hombre viudo y la mujer viuda. Si uno de los dos ha sido el proveedor, el que queda tiene que aprender a asumir responsabilidades que antes no tenía como por ejemplo, pagar la casa, pagar la luz...  ¿Cómo pueden enfrentar esta situación?  Aunque ambos sea proveedores, cuando falta uno se genera un desequilibrio y es necesario aprender a enfrentar las situaciones de la vida cotidiana.  Esta situación nos va a llevar a estar en una situación que es miedo, temor, pánico. ¿Y ahora qué?  Como el duelo nos coloca en un espacio que tiene que ver con la debilidad y la fragilidad es importante aprender a reconocer que eso también forma parte de mi vida, asumir que soy un ser frágil, que necesito apoyo. 

Yo creo Magaly que estas son algunas de las claves relacionadas con el duelo: 


  1. Reconocer, que en este momento de duelo, lo que yo puedo hacer conmigo es ésto, 
  2. Darme cuenta de lo que siento, 
  3. Buscar contención y apoyo dentro de lo que yo siento que necesito y no dentro de lo que los demás sienten que me quieren dar. 


Y con esto me despido por el día de hoy.  Si desean contactar a Magaly Pérez lo pueden hacer por las siguientes coordenadas:


Mail: magalycoromoto@yahoo.es
Celular:  04122397501

Twitter: @magaperezlafe


Cierro el programa de hoy con esta cita de la Dra. Joyce Brothers, de su libro: Viudo

"Si algún día llegara a existir otro buen hombre con el cual pudiera compartir mi vida, siempre existirá ese rincón vacío en mi alma.  Yo sé lo que tenía y lo que perdí.  Espero no pasar el resto de mi vida sola.  Pero de ser así, no voy a sentir lástima de mí misma.  La vida continúa, y ya estoy lista para unirme al desfile de nuevo.”  

Nos encontramos todos los jueves de 5 a 6pm (hora de Venezuela) por Radio Comunidad (www.radiocomunidad.com)


Audio Completo del Programa 

Si deseas escuchar el audio completo de esta edición de Parejejando Ando,  lo puedes hacer en el siguiente enlace:  "AHORA QUE SOY VIUDO",